Consentimiento informado

¿Consentimiento? ¿Informado? 

Los abusos en la medicina de la primera mitad del siglo XX fueron tratados por la bioética bajo la forma de protocolos de información y recogida de la autorización del paciente. El consentimiento informado fue la forma contractual de recoger la voluntad del paciente.

Pero como constatamos en el mundo del capitalismo, en una sociedad regulada por contratos, impera la desconfianza, el deseo deviene problemático y sus formas pueden ser vividas de nuevo como un abuso. Mientras, el consentimiento se extiende como forma de relación.

En medicina se solicita el consentimiento para las pruebas invasivas, las intervenciones quirúrgicas, fecundación asistida y, ahora, para la eutanasia y el cambio de sexo. En las relaciones personales, por lo que se refiere al sexo, hablamos de relaciones que se llaman “consentidas”: relaciones sexuales entre pares o con el menor maduro, malos tratos o violencia en la pareja, personas que se prostituyen.

El psicoanálisis nos permite leer el problema médico del consentimiento como formando parte de un síntoma en las relaciones personales de nuestra época.

¿De qué es síntoma este problema? ¿Hasta qué punto el ser humano es autónomo en sus decisiones? ¿Qué es consentir? ¿Qué es informar? ¿A qué se cede cuando se dice sí? ¿Ceder es lo mismo que consentir? ¿Qué efectos observamos en la práctica cotidiana cuando los pacientes se arrepienten de eso a lo que consintieron? ¿Cómo se trata?

Durante el curso 2021-2022 estudiaremos el consentimiento en diversas condiciones humanas para esclarecer lo que se juega en la relación profesional/paciente cuando se solicita. Trabajaremos con la bibliografía propuesta y se trabajará un caso clínico en cada reunión.

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